La Puerta de Plata [Licántropos]

La manada de La Puerta de Plata es una manada basada en un código de honor y ética. Este código es conocido como «La Doctrina». Romper la Doctrina supone traicionar a tus hermanos y, por ende, supone la muerte del licántropo en cuestión. Cualquier licántropo que pertenezca a la manada de la Puerta de Plata debe saber que romper cualquiera de las máximas supone la muerte. Además y, como es obvio, el desconocimiento de la Doctrina no exime su cumplimiento. De cualquier forma, para terminar con este falso alegato de inocencia, el Alfa ha decidido imponer la memorización de la Doctrina. Hay que recordar la doctrina palabra por palabra de forma que no puedas desconocerla.

La Doctrina no solo funciona como código jurídico, sino también como un código de honor que ha de ser seguido al pie de la letra. El cumplimiento de la Doctrina supone un ascenso meteórico en la sociedad de la Puerta de Plata. De esta forma todo aquel que cumpla con sus deberes será recompensado con nuevos derechos y placeres, todos provenientes del dinero de Ahren.

Los Licántropos se refieren a las máximas por su posición en la Doctrina (la primera, la decimocuarta, etc.) cuando han de hablar sobre ellas. Obviamente, estas leyes están sujetas al cambio permanente y en cualquier caso pueden ser modificadas excepto durante los periodos de guerra. Además, se basa en un sistema de monarquía electiva. El Alfa es aquel a quien respaldan los licántropos, pudiendo haber varios alfas al mismo tiempo, lo que llevaría a la guerra.

Es importante resaltar el carácter electivo de esta manada. Jamás toman decisiones de forma unilateral, si no que realizan los «Concilios» en los que se ponen de acuerdo todos para tomar las lógicas decisiones. Todos los licántropos de la Puerta de Plata son iguales en condición y ninguno puede romper ninguna de las normas de la Doctrina, igual que tampoco puede actuar por su cuenta. Todo es parte de la manada y por ende ha de contar con el apoyo de la manada, incluso las acciones del Alfa.

Por último, lo más importante es que la Doctrina tiene un carácter expansionista. Un Licántropo de la Puerta de Plata ha de tratar de convencer a los demás licántropos de que sigan la Doctrina, y, por ende, castigar a aquellos que la rompan la sigan o no. La Doctrina es una ley para la supervivencia, no para el poder.

No probarás la carne de humanos.
No derramarás la sangre de tus hermanos.
No desafiarás a tu alfa en tiempos de guerra.
Ocultarás tus huellas, tu rastro.
Respetarás las decisiones de tus hermanos.
Respetarás el territorio de tus hermanos.
No desvelarás tu condición si no es innecesario.
Jamás convertirás a un humano sin permiso del alfa.
No engendrarás hijos sin permiso de tus hermanos.
No abandonarás tu manada.
No desposarás a un humano.
Lucharás contra la bestia de tu interior.
Sólo confiarás en tus hermanos.
Acabarás con la existencia de los vampiros o morirás intentándolo.
No trabarás amistad, pactos, contratos, ni trato de ningún tipo con vampiros.
No convertirás brujos.
Romperás cualquiera de estas máximas si tú o tus hermanos estáis en peligro.
Durante las noches de Luna Llena te encerrarás tras la Puerta de Plata.

La ruptura de cualquiera de las normas supone la pena de muerte. Si bien es posible que haya atenuantes que supongan un castigo menor, esta será la tónica general de cualquier juicio.

Carentes, por ahora.